Si tenés una DSLR (reflex) o una cámara compacta o bridge con buen zoom, estoy seguro que al menos una vez intentaste al ver una enorme luna llena tomar una buena foto de ella.
En otras oportunidades escuchamos sobre el anuncio de un próximo eclipse lunar y también pensamos en capturar el momento, pero sabemos hacerlo realmente. Sin dudas lo más interesante es tomar la luna con un fondo interesante como la ladera de una montaña o el horizonte de la ciudad o inclusive asomando entre los edificios.
Si alguna vez intentaste algo de esto y no tuviste el resultado deseado esta guía es para vos.
1) ¿Por qué la luna se ve pequeña en las fotos?
Antes de comenzar vamos a responder algunas preguntas básicas. Estoy seguro que más de una vez intentaste fotografiar la luna y el resultado fue un pequeño punto blanco quemado y sin detalle en medio del cielo. Pero por que pasa esto?
La respuesta es sencilla, estás utilizando un objetivo gran angular, o sea un lente que te permite capturar un amplio ángulo de visión pero sin ampliación. No hay forma de tomar una fotografía de la luna que sea “decente”con un celular, no le busques porque no podrás!
Ok, pero que necesitaremos? Al menos un teleobjetivo medio, lo ideal es al menos alcanzar una focal de 200mm o más. De esta forma nos “traeremos” la luna hacia nosotros, podremos capturar los detalles, los cráteres, las sombras, la textura.
Si no tenes un teleobjetivo y solo contás con el objetivo de kit de tu cámara, un 18-55 tal vez, no desesperes usalo en la máxima focal y practica la técnica. Quizás la ampliación no sea la mejor pero seguro obtendrás fotos interesantes.

2) ¿Por qué la luna se ve como un círculo blanco?
Si tomaste la foto y la luna se ve como un plato blanco, sin ningún detalle es simplemente porque está sobreexpuesta. Generalmente esto sucede porque la cámara al evaluar la cantidad de luz que hay en la escena simplemente desestima la luna y la ignora. Entonces los parametros de exposición son elegidos para lograr una correcta exposición del resto de los elementos que aparecen en el encuadre y como consecuencia, la luna que es mucho más brillante que el resto sale quemada.
Pensemos en que tomamos una foto en una habitación que tiene una lámpara en el techo, en la foto la exposición se ajusta para que el ambiente se vea correctamente expuesto pero la bombilla en sí sale quemada, blanca, sin detalle. Con la luna pasa igual.
¿Pero como lo solucionamos? Bueno ya vamos a llegar a esto…
3) ¿Donde y cuando fotografiar la luna?
El primer y más simple consejo es fotografiar la luna en una noche despejada, sin nubes en el cielo. Incluso una pequeña capa de nubes hará imposible lograr una imagen clara y nítida de la luna.
La polución lumínica y atmosférica de las grandes ciudades representan una complicación extra para obtener las mejores fotografías de la luna, lo más recomendable es alejarse de la ciudad y en lo posible escoger una ubicación elevada. Si querés conocer como encontrar lugares sin contaminación lumínica te recomendamos que leas este artículo.
En cuanto al “cuando” no hay un tiempo ideal, tanto en la noche o en el día podemos obtener imágenes increíbles de nuestro satélite. Pero si lo que buscas es una Luna Llena, te recomiendo que utilices una APP para tu teléfono o tablet o que consultes con alguna web las fechas exactas de la próxima luna llena.
Personalmente utilizo una APP gratuita que se llama Lunar Phase, es para iOS (iPhone y iPad) que no solo me dice las próximas fechas de la luna llena, nueva, etc, sino que también me dice a que hora “sale” la luna y a que hora “se esconde” en mi ciudad.
Si buscas la perfecta luna llena, no la tomes en el día en que justo está llena, es preferible tomarla un día antes o uno después, cuando la luna está al 98% en vez del 100%. ¿Por qué es esto? simple, cuando la luna está al 100% la luz que incide en ella es perfectamente frontal y esto minimiza las sombras y la tridimensionalidad de su relieve. 😉
4) Equipo necesario
- Una cámara DSLR o Bridge con un objetivo de distancia focal en el rango tele. (200mm +)
- Un trípode estable.
- Un disparador remoto (opcional). Si no lo tenés, podes utilizar el timer para selfies de la cámara.
5) Logrando la máxima nitidez
Queremos lograr el máximo detalle, por lo tanto es sumamente importante que la cámara permanezca quieta durante el disparo, es por ello que necesitaremos un trípode de buena calidad y realizar el disparo sin tocar la cámara. Esto último podemos hacerlo con un disparador remoto o simplemente colocando el modo de retardo de exposición para tomar selfies.
Si nuestra cámara lo dispone es aconsejable utilizar el modo de bloqueo de espejo, que consiste en levantar el espejo de forma anticipada de modo que la vibración de este no sacuda la cámara al momento del disparo.
Si no lo tiene es posible que tenga alguna opción de retardo de exposición en la que al dispara lo que hace es levantar el espejo, dejar pasar una fracción de segundo y luego hacer la toma. Una vez más la respuesta a esto no está en otro lado que el manual de nuestra cámara.
6) Configurando la cámara. El disparo perfecto.
Una cosa que tenemos que tener en cuenta es que por más que no lo parezca la luna se mueve, y lo hace muy rápido. En realidad es el movimiento conjunto entre la tierra y la luna pero a nuestros ojos la luna se mueve. Que quiere decir? que tenemos que obturar relativamente rápido. Otra cuestión que no resulta muy intuitiva es que la luna tiene mucha luz! Muchos creen que hay que hacer una larga exposición en la luna porque la tomamos de noche… ERROR! La luna es un objeto muy brillante y no requiere una exposición muy distinta a la que utilizaríamos en un día nublado en el parque. 😉
Entonces:
- Colocamos la cámara en MODO MANUAL. No pasa nada, no muerde…
- El ISO en 200. (y nos aseguramos que no tenga activado el Auto ISO)
- La apertura en f/11.
- La velocidad en 1/250 seg.
- Pasamos el enfoque a foco manual (MF) y enfocamos en la luna a mano. Esto requiere una buena mano, precisión y buen ojo.
Otra cosa que podemos hacer es horquillar el disparo (bracketing) de modo que logremos 2 ó 3 tomas de distinta exposición sobre todo para fusionar el fondo y exponer para distintas condiciones de luz.
Conclusión:
Fotografiar la luna no es complicado, es uno de los pocos casos en que podemos aplicar un “receta de cocina” y sabemos que va a funcionar bien. Recordá que lo interesante es hacer participar a esa luna en un encuadre de por sí interesante y hacerla complementar nuestra foto. No suele ser muy impactante una luna suelta en un cielo negro, juga con la luna y su posición en el encuadre y su interacción con el horizonte. La técnica es sencilla y efectiva.
Esperamos tus comentarios, vas a probar estos consejos?
excelente!
Saludos hermano Javier
Desde Orizaba Veracruz Mex.
Si vienés avisa por favor
Gracias por la sencillez de la explicación, vamos a ver los resultados.